Tabla de contenido:
- Combina cardio y pesas
- Cambio de deporte y entrenamiento
- Limite los azúcares
- Come proteínas, controla los carbohidratos
- Limitar el alcohol
- Véndete con las calorías
- Planifique sus comidas
Video: Siete buenos hábitos para ponerse en forma (y mantenerse en forma)
2024 Autor: Devin Ellington | [email protected]. Última modificación: 2024-02-01 12:56
Para volver a estar en forma, la dieta por sí sola no es suficiente y no es necesaria: aquí hay siete pequeños buenos hábitos que debes seguir constantemente para recuperar y mantener tu figura.
No solo existe la escala, pero también la forma en que la ropa marca los puntos críticos del cuerpo o por el contrario se desliza sobre las curvas.
Investigación (y mantenimiento) de la aptitud física lo que más nos conviene es el trabajo constante y con demasiada frecuencia provoca desesperación, cuando los resultados obtenidos con tanto esfuerzo desaparecen tan pronto como la dieta termina o se diluyen las visitas al gimnasio.
La verdad es de hecho que no basta con hacer sacrificios y sacrificios durante unas semanas para tener un cuerpo perfecto, se necesita dedicación y perseverancia.
Lo cual, en retrospectiva, es una buena noticia, porque para mantenernos en forma sufrimos mucho menos si en lugar de sacrificios drásticos acostumbramos al cuerpo a buenos hábitos pequeños e inofensivos.
Y yo los resultados obtenidos durarán para siempre, permitiéndonos olvidar la palabra dieta.
Solo hazlos tuyos siete buenos hábitos.
Combina cardio y pesas
Hacer ejercicio cinco veces a la semana, pero de forma incorrecta, realmente es de poca utilidad.
Mejor enfoque en actividad cardiovascular, que quema calorías durante el ejercicio, pero combinado con los pesos, que te permiten ganar masa muscular (que consume muchas más calorías en reposo que magra).
El ideal seria hacer ejercicio tres veces a la semana y en los días restantes Camine tanto como sea posible y siempre use las escaleras.
Cambio de deporte y entrenamiento
El cuerpo es una máquina perfecta, pero va estimulado continuamente.
Para asegurarse de que siga ardiendo tendrás que mejorarlo y desafiarlo continuamente.
Agregue peso adicional cuando haga ejercicio o alterne la piscina con correr y yoga. Prueba diferentes clases en el gimnasio. y si te pasa explorar nuevas actividades los fines de semana, ya sea senderismo o esquí, según la temporada.
Lo importante es no permitas que el cuerpo se duerma en los laureles.
Probablemente también terminará divirtiéndose más.
Limite los azúcares
Entrenamiento físico es solo una parte de la ecuación.
Para obtener resultados, debe cambiar sus hábitos alimenticios y adoptar una dieta sana y equilibrada, en el que se minimiza el consumo de azúcares.
Aliments ya en la naturaleza contienen azúcar y esto es suficiente para las necesidades diarias.
Desechar la cucharadita de azúcar., miel o edulcorante que agregamos al café, o postre después de las comidas, es el primer paso hacia una nueva y más saludable vida.
Guárdelo como una excepción.
Come proteínas, controla los carbohidratos
Renunciar al pan y la pasta es difícil y aunque los resultados inmediatos son significativos, a la larga es de poca utilidad.
Bastante, reducir las porciones, reemplazando parte de ella con proteínas o vegetales.
Pescados y legumbres, acompañados de grandes cantidades de verduras, son los alimentos preferidos. Si bien seria bueno comprobar la ingesta de queso y productos lácteos, poco digerible y con frecuencia causa problemas digestivos y la consiguiente hinchazón.
Limitar el alcohol
Cuando el número de salidas, aperitivos y ocasiones en las que te deleitas con una copa de vino o un cóctel es demasiado, efectos en la cintura se ven casi al instante.
El alcohol ya contiene uno en sí mismo. gran cantidad de azúcar, que aumentan cuando se mezclan con jugos y bebidas.
Es mejor reemplazarlo con bebidas no alcohólicas a base de fruta fresca, extractos o, mejor aún, un vaso de jugo de tomate.
Véndete con las calorías
La comida es emoción, por eso a menudo nos dejamos llevar perdiendo el recuento de calorías (como debería ser).
Cuando quiera darse un capricho o esté planeando una cena particularmente rica, pon las puntuaciones de nuevo en equilibrio programando una sesión de jogging adicional.
Sin contar las calorías de tu plato, pero presta atención a lo que comes (o picar) durante el día.
Prueba un diario de comida en el que escribir todo, incluidos los dulces, lo que comes en un día. Te ayudará a concentrarte en ello.
Planifique sus comidas
La mejor forma de no ceder a la tentación es no tenerlos frente a ti.
Durante la semana prepara tu propio almuerzo para comer en la oficina o al parque y evite atiborrarse de sándwiches y envolturas.
Incluso las ensaladas de bar no siempre son dietéticos porque contienen demasiados alimentos, que sumados equivalen a cualquier otro plato.
Mejor hazlo tu mismo combinando ahorro y dieta.
Y cuando sepas que tienes que salir a cenar ya prepárate mentalmente decidiendo lo que vas a ordenar, eligiendo entre un aperitivo y un plato o un plato y un postre.
A pesar de que al menos un día a la semana puedes disfrutar de todosiempre que siga estos consejos durante los otros seis días.
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